La relación entre tecnología y cultura digital en el
contexto local y regional Colombiano creo que es un avance maravilloso para la
educación y en especial para la cultura, dado que desde tu casa, oficina o
incluso desde un celular inteligente está al alcance de tu mano textos de todo
tipo; imágenes, música, películas, respuestas a todas tus preguntas
mostrandonos en ese momento, que miles de personas en el mundo ya se habían
preguntado lo mismo, también una CIBERCULTURA inigualable, allí encontramos
desde manuales sobre cine digital, hasta ensayos filosóficos sobre la Cultura
(así, en mayúsculas) en tiempos de Internet. Raymond Williams decía que la
palabra “Cultura” es una de las tres o cuatro palabras más complicadas en el
idioma Inglés. En castellano no parece ser menor la dificultad.
Más allá de sumar un adjetivo al complejo concepto que es
de por si la Cultura, lo que parece claro es que, después de un recorrido por
la virtualidad y la “ciberexistencia”, las tecnologías de información y
comunicación están cada vez más integradas en nuestra vida cotidiana y son cada
día más el cemento del edificio de la cultura, la de siempre, en sentido
amplio, por ejemplo en Colombia "nuestro adorado País" a través del
internet y de las redes sociales, las zonas rurales han podido tener mucho más
participación política, conocimiento de lo que sucede al interior del País, ven
imágenes, pueden preguntarse si están o no de acuerdo con el proceso democrático,
procesos de entretenimiento y todas las demás actuaciones culturales
manifestadas en selfies, vídeos virales que cambian incluso la votación
presidencial y un universo maravilloso que a través de la tecnología a dado a
conocer nuestra cultura no solo al mundo entero si no incluso al interior de
nosotros mismos, pero de igual manera los urbanos, los llamados cultos
citadinos también hemos podido conocer de ese interior, de esos campesinos, de
esa guerra sucia, de esos colores de la montaña, de esos ríos, de esos mares y
por supuesto de este pueblo que ya el mundo se les abrió gracias al internet.
Pero, no podía faltar el "pero" en este pequeño
ensayo y es precisar que aún nos falta mucho más en este desarrollo tecnológico
y cibernauta, falta la estructura que nos brinde educación para el buen uso de
las tecnologías, el uso de la netiqueta y posiciones claras y contundentes
contra el matoneo.
Por Yesenia Valencia
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ResponderEliminarTecnología y ciberexistencia. Jairo Alberto Cardona Reyes. Revista de Filosofía Nuestramericana. Volumen 7. Semestre I– 2015. p.15. ISSN 0719 – 1359. Disponible en: http://ofmor.blogspot.mx/2015/05/publicacion-del-volumen-7-de-la-revista.html
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